“No son siempre los hombres quienes mejor se adaptan a la administración exitosa de una iglesia.” (El Ministerio Pastoral, p. 38)

“Se necesita la influencia refinadora y suavizadora de las mujeres cristianas en la gran obra de predicar la verdad.” (El Ministerio Pastoral, p. 88)

“Si hubieran veinte mujeres donde ahora hay una, que hicieran de ésta santa misión su obra predilecta, veríamos muchas más almas convertidas a la verdad.” (El Ministerio Pastoral, p. 88)

“Es el acompañamiento del Espíritu Santo de Dios lo que prepara a los obreros, ambos hombres y mujeres, para llegar a ser pastores de la grey de Dios.” (Testimonios para la Iglesia, Tomo 6, p. 322 versión en inglés)

“Hay mujeres que debieran trabajar en el ministerio evangélico.” (Manuscritos Publicados, Tomo 5, p. 325 versión en inglés)

“Debería haber hombres y mujeres que estén calificados para trabajar en las iglesias… a fin de que puedan llevar a las almas a contemplar a Jesús.” (Consejos para la Iglesia, p. 365)

“Que sean hombres y mujeres …. que puedan servir [ministrar] tanto con palabras como en acciones.” (Testimonios, Tomo 6, p. 91-92)

“Las mujeres… deben ser apartadas… mediante la oración y la imposición de manos.” (El Ministerio Pastoral, p. 257)

“Cuando Dios creó a Eva, quiso que no fuera ni inferior ni superior al hombre, sino que en todo fuese su igual.” (Testimonios, Tomo 3, p. 531)

“Si Dios le extiende a su esposa un llamado especial a la obra de enseñar la verdad,… Dios puede darles a ambos, por cuanto sienten el mismo interés y devoción por la obra, calificaciones equivalentes para desempeñar una parte prominente en la tan solemne obra de salvar almas.” (Testimonios, Tomo 1, p. 613)

“Cuando ha de realizarse una obra grande y decisiva, Dios escoge a hombres y mujeres para hacer su obra, y esta obra sentirá la pérdida si los talentos de ambas clases no son combinados.” (Carta 77, 1898; El Evangelismo, p. 343)

“Hombres y mujeres jóvenes, quienes tendrían que estar empeñados en el ministerio … no debieran sujetarse al empleo mecánico.… Algunos recibirán el adiestramiento necesario para entrar en el campo como enfermeros misioneros, otros como colportores, y algunos como ministros del evangelio.” (Testimonios, Tomo 8, p. 241)

“Si los hombres y las mujeres actuaran como la mano ayudadora de Dios… la gloria del Señor sería su salvaguardia…. De aquellos quienes actúan como Su mano ayudadora, el Señor dice, ‘Vosotros seréis llamados sacerdotes del Señor; hombres os llamarán los ministros de nuestro Dios.’” (Manuscrito de Enero 17, 1901)

“Hay que elegir para la obra a hombres sabios y consagrados que puedan realizar un buen trabajo en la tarea de alcanzar a las almas. También debiera elegirse a mujeres que puedan presentar la verdad en forma clara, inteligente y directa.… Como obreros necesitamos a hombres y mujeres que comprendan las razones de nuestra fe y comprendan cuál es la obra que debe llevarse a cabo para comunicar la verdad….” (Carta 54, 1909; El Evangelismo, p. 345)

“La labor misionera—la presentación de nuestras publicaciones a las familias, la conversación y la oración con y por ellas—es una buena tarea que educará a los hombres y las mujeres para la labor pastoral.” (Testimonios, Tomo 4, p. 383)

“Actualmente la causa de Dios necesita a hombres y mujeres dotados de cualidades extraordinarias y de facultades administrativas superiores…. que luchen por elevar y restaurar a la humanidad caída.” (Testimonios Tomo 7, p. 237)

“La causa de Dios necesita para este tiempo hombres y mujeres que posean cualidades semejantes a las de Cristo para el servicio: habilidad ejecutiva … luchando siempre por levantar y restaurar a la humanidad caída.” (Manuscritos Publicados Tomo 2, p. 88 versión en inglés)

“No cometamos el error de no corregir la práctica de dar a los pastores sueldos inferiores a los que merecen…. El diezmo debe ser utilizado para [pagar a] aquellos que trabajan en palabra y doctrina, sean hombres o mujeres.” (Manuscritos Publicados 1, p. 263 versión en inglés)

“Enseñe esto, hermana mía… Hable a la congregación cuando quiera que pueda hacerlo… Cada hombre y cada mujer tiene una obra que hacer para el Maestro.” (El Evangelismo, p. 346)

“Yo [la Hermana White] no pido permiso para tomar el púlpito en el tabernáculo. Yo lo tomo como mi posición con derecho acordado por Dios para mí.” (Manuscrito 30, junio de 1889)

“Las mujeres que tienen la obra en el corazón, pueden realizar una tarea en los distritos en que residen. Cristo habla de las mujeres que lo ayudaron a presentar la verdad a los demás, y Pablo habla también de mujeres que trabajaron con él en el Evangelio. Pero cuán limitada es la obra hecha por las que podrían hacer un gran trabajo si quisieran.” (Carta 31, 1894; El Evangelismo, 340)

“Estudien las Escrituras por más luz sobre este punto [mujeres en el ministerio]. Mujeres estuvieron entre los seguidores devotos en los días de Su ministerio, y Pablo menciona de ciertas mujeres quienes eran colaboradoras junto con él en el ministerio (véase Fil.4:2-3).” (Carta 142, 1909; Manuscritos Publicados, Tomo 12, pp. 166-167 versión en inglés)

“Los que se mantendrán en pie ahora, son los hombres y las mujeres de corazón íntegro y que se han decidido completamente. Vez tras vez Jesús seleccionó a sus seguidores hasta que en cierta ocasión quedaron sólo once y algunas mujeres fieles con los cuales edificaría el fundamento de la iglesia cristiana.” (Testimonios, Tomo 5, p. 122)

Mas “Cristo, no el ministro, es la cabeza de la iglesia.” (Señales de los Tiempos, Enero 27, 1890)

“Nosotros no podemos tomar una posición donde la unidad de la iglesia consista en ver cada texto de las Escrituras en la misma luz.” (Manuscritos Publicados, Vol. 11, p. 266 versión en Inglés). Mas bien, “El secreto de la unidad se halla en la igualdad de los creyentes en Cristo.” (Mensajes Selectos, Tomo 1, p. 304)

(There is also an English version.)